Un terremoto es el movimiento brusco de la Tierra que se percibe como sacudidas o temblores y el origen proviene del choque entre dos placas tectónicas, de la inyección de agua fría en yacimientos geotermales, de los ensayos de armas atómicas o del desbaratamiento de cuevas subterráneas. Este tipo de fenómeno sucede desde tiempos inmemoriales y siempre han ocasionado tragedias y catástrofes secundarias.
Al igual que otros fenómenos naturales, el terremoto tiene varias escalas de medición para calcular cuál es la intensidad, siendo dos de las más famosas la escala de Ritcher con 10 puntos como máximo y la escala de Mercalli con 12.