La infancia es un producto del desarrollo histórico humano y se trata de la etapa vital que transcurre entre el nacimiento y el principio de la adolescencia, además, dentro de la misma hay etapas diferenciadas, las cuales ofrecen actividades, normas, valores y singularidades propias del desarrollo psíquico. La infancia suele tener un tinte nostálgico y melancólico, ya que el ser humano tiene la capacidad de destacar lo positivo y de decir que esos años eran más idílicos que el presente.
Una de los aspectos más importantes es la propuesta de actividades estimulatorias para mejorar los sistemas de recepción de los mensajes que le llegan del entorno, ya sean visuales, auditivos, olfativos y gustativos.