¿Qué es un fenómeno natural? Se define así al cambio de la naturaleza que se produce por si solo, sin la intervención de nada, más concretamente, es aquel proceso continuo de alteraciones que padece la naturaleza y que de una forma u otra interviene en la vida del individuo. Dentro del mismo se pueden encontrar diversos fenómenos muy peligrosos a los que se les denomina desastre natural ya que quiebran todo lo que hay a su alrededor.
El huracán y el tornado son dos de los fenómenos naturales más peligrosos y destructores que hay en la Tierra, teniendo en cuenta que los primeros surgen en lugares tropicales ocasionando multitud de pérdidas de seres vivos y de materiales.
Para tener un conocimiento mayor acerca de estos dos fenómenos es necesario realizar las diferencias más destacadas entre ambos.
Diferencia en el concepto
- Huracán: es un fenómeno meteorológico que trata de una tormenta tropical que se genera en el mar como motivo de sus fuertes vientos ya que es un lugar donde hay una presión atmosférica reducida. Normalmente se producen en el Océano Atlántico.
- Tornado: es un fenómeno meteorológico en el que se forma un viento rotatorio que va desde la tierra hasta las nubes y se produce como motivo del enfrentamiento entre una flujo de aire caliente y húmedo con otro flujo de aire frío y seco. Normalmente se producen en el Océano Pacífico.
Diferencia en la creación
Una de las diferencias más destacadas entre ambos es el lugar en el que se originan. El huracán siempre se forma en el océano, sin ninguna posibilidad de que se produzca en otro lugar, mientras que el tornado tiene origen en la tierra o en sitios que están cerca de la costa.
Diferencia en el tamaño
El huracán tiene un tamaño muy grande ya que el diámetro abarca los 1.400 kilómetros mientras que el del tornado es un tamaño mediano al tener un diámetro de 550 metros.
Diferencia en la velocidad
Otra de las diferencias a tener en cuenta es la velocidad, siendo el huracán más lento al tener una media de 120 km/h a 250 km/h. En el caso del tornado varía dependiendo la dimensión que tenga pero normalmente el viento suele rondar de 65 km/h a 580 km/h, siendo capaz de llevarse cualquier elemento que haya en la ciudad o el campo.
Diferencia en la duración
Por un lado, el huracán tiene una vida más larga ya que es capaz de vivir varios días, eso sí, todo depende de las condiciones en las que se encuentre.
Uno de los ejemplos más destacados es el huracán Nadine que estuvo 23 días en activo o el huracán Irma que estuvo 17 días y fue el más catastrófico.
Por otro lado, la vida del tornado es mucho más breve, realmente puede durar unos minutos aunque a veces hay excepciones y dura horas.
Diferencia en el pronóstico
Por último, es habitual que se pueda vaticinar el huracán ya que es más sencillo de saber su itinerario y el lugar en el que se origina, mientras que con el tornado es mucho más complicado.